Sabes...me asusta un poco.
O sea, me pone intranquilo.
Podria ser la curiosidad.
O la capacidad de asombro.
Pero me pasa eso.
Cada vez que pienso que nuestra piel alberga tantos micro organismos, que al ser organismos presuntamente estan vivos.
Me pone tan...no se, la verdad.
Me rio como si me riera como un estupido.
Es felicidad?
Como si me inflaran el corazon
Que se yo, capaz que al pensar en cosas asi se activa algun tipo de enfermedad (¿?)
Miro a los parajos y trato de visualizarme como uno, entrando en el nido volando, usando el pico para colaborar con otros seres, ver el mundo desde arriba, me siento muy asombrado al ver eso, a la vez de que me siento muy asombrado de ser humano, todo lo que implica, me siento como...no se, cuando uso el razonamiento o mi mente para pensar justamente en mi mente y razonamiento y al escribir eso puedo hacer verdad que en algunas cosas el ser humano es una paradoja, un circulo vicioso, y tambien una linea recta.
Que se yo, me encanta tambien esa sensacion.
Que raro. pero bue.
Seguire despues.
¨Simplemente es... hasta donde yo pueda llegar con mi propio ser... Sr. Juez¨
1/10/09
Ser diferente (Psicologia Transpersonal)
Como sabemos, todos somos diferentes a los demás, únicos en nuestra especie. Pero no me estoy refiriendo aquí a ese "ser diferente", sino a todos aquellos que son todavía un poco más diferentes que los demás. A aquellas personas (niños, adolescentes, adultos) que son vistos por los otros y peor aún, a veces por ellos mismos, como distintos, raros, o directamente locos.
* Aquellos que no se sienten comprendidos en su hipersensibilidad esencial y a los que la vida les duele demasiado.
* Aquellos que están en la búsqueda constante de un Sentido trascendente de la Vida. De un conocimiento profundo de sí mismos y de lo que los rodea.
* Aquellos que se hacen preguntas macrodimensionales que trascienden lo inmediato y que ninguna respuesta fácil puede satisfacer.
* Aquellos que no tienen puestas sus expectativas en el éxito económico o profesional, sino que miran su "estar en el mundo" de una manera distinta, con valores personales más éticos y más humanos, que no encajan con los valores socio-culturales vigentes, a los que sienten como mediocres, como desviados de lo verdaderamente importante.
* Aquellos que por sentirse inadecuados en la mayoría de las situaciones sociales (como si no tuviesen la clave de los códigos que los demás parecen compartir), tienen una marcada dificultad para establecer vínculos sociales, eligiendo entonces la soledad para no ser discriminados.
* Aquellos que vibran emocionalmente con gran intensidad con todo lo que los rodea y por lo tanto se sienten demasiado vulnerables frente a las corazas y máscaras que portan la mayoría.
* Aquellos niños que nos asombran con preguntas o reacciones que no condicen con su edad. Que muestran una profundidad y una curiosidad y ansias de comprensión ajena a su edad.
* Aquellos que tienen una avidez de conocimientos que parece insaciable, que necesitan en todo momento investigar y sobre todo comprender el Misterio que los rodea. los eternos Buscadores.
Estas personas, lamentablemente una proporción pequeña en las estadísticas mundiales, en general nacen y crecen sintiendo y padeciendo estas diferencias, pero sin entenderlas. Es más, a sus propias percepciones se les suma la descalificación de los demás que, como bien sabemos, tienden a alejar a "lo distinto". Los que trabajamos como terapeutas con un enfoque transpersonal, estamos acostumbrados a ver entrar a nuestros consultorios los "despojos" que otros desecharon, simplemente por no entenderlos. Y damos gracias a la Vida porque por fin pudieron venir al lugar correcto, con un terapeuta "tan distinto" como ellos mismos. Y así, poder mostrarles que sí son distintos, pero posiblemente con un "plus" que hasta ese momento no podían ver. Y cuando hablo de plus, no lo hago comparativamente como más valioso, sino como a algo que la mayoría de las personas aún no pudieron acceder: la mayor evolución de su conciencia que les permite tener una conexión con la propia esencialidad. Como ya expliqué en "Un poco de historia" dentro de este mismo sitio, con respecto a los distintos niveles evolutivos de la conciencia y la propia espiritualidad, podríamos decir que son seres que están mucho más cercanos a su verdadera Esencia que el resto. Cuando un bebé nace, es casi esencia pura, "envasada" en un cuerpo que le permite vivir la experiencia humana y con un instinto de supervivencia que va haciendo que busque lo que todo ser humano necesita: que le den afecto, cuidados, atención, amor. Así, guiándose por el ensayo y el error, va probando distintas conductas hasta que encuentra y repite las que cree que son aceptables para sus mayores. Pero en esta selección, van quedando fuera todas las demás posibilidades que también lo constituyen. Más que dejarse crecer y ser todo lo que podría, elige aquellas que siente que son las "aprobadas". Y así comienzan a funcionar los condicionamientos socio-culturales, encarnados en principio por sus padres y familia, y luego por el colegio, amigos, televisión, la sociedad toda. Y que se traducen en todos los "deberías" y "tendrías" que tan bien conocemos. Sus padres (como lo hicieron anteriormente sus propios padres y así sucesivamente), los van llevando a sus propias normas de conductas, valores, y ¡hasta de emociones! que son esperables en él. Así, de a poco, se va construyendo su sentido del Yo, diferenciándolo de "los demás", y también, de a poco, va surgiendo su Ego, que como tiene sus raíces en el cuerpo, se mueve en base a las leyes de la materia: preservarse, sobrevivir, predominar. Muchas veces se malinterpreta que la Psicología Transpersonal está en contra del ego considerándolo algo "malo" que debe morir para poder alcanzar la verdadera espiritualidad. La verdad es muy otra: un Ego sólido es necesario para vivir dignamente en el reino de la materia y así lograr una sana integración entre todo lo que somos: cuerpo-mente-espíritu. Pero cuando ese Ego se junta con los valores socio-culturales predominantes en nuestro mundo, va surgiendo como prioritario la necesidad de Éxito (así, con mayúsculas) tapando con dinero, casas, autos, títulos, etc., nuestra verdadera Esencia. Es como si cada éxito material fuese un velo que nos aleja más y más de lo verdaderamente Trascendente que hay en nosotros. De lo que verdaderamente Somos. Y así nos volvemos cada vez más ignorantes de nosotros mismos. Como dicen las Tradiciones de Sabiduría, vamos dormidos por el mundo sin ver quién somos verdaderamente más allá de los condicionamientos y mandatos que nos fueron dando forma. Pero hay personas que parecería que los velos de la vida no lograron tapar totalmente su esencia. Seres que no se han adormecido con lo material de la existencia: personas que se preguntan para qué nacieron, qué buscan, cuál es el Sentido del nacer y del morir. Son esas personas a las que caractericé antes como "distintos" de los demás. Seres que tal vez sin poder entenderlo o expresarlo claramente, están más ligados con el Todo. Esos seres en el proceso de Búsqueda de sí mismos, van subiendo desde la base de la pirámide de la evolución de la conciencia (donde se encuentra la mayoría dormida, ignorante), escalón tras escalón, hacia la cúspide. Y cuanto más elevado es el nivel de conciencia, menor será la cantidad de individuos que estén en el mismo nivel , siendo ínfimo el número de personas que podrían contabilizarse en la cumbre, donde morarían las conciencias más esclarecidas (quizás el nivel de un Cristo, de un Buda o de cualquier ser Iluminado). Hay dos términos acuñados por la Lic. Virginia Gawel y Eduardo Sosa, co-directores del Centro Transpersonal, que estudiaron exhaustivamente este tema y que me parecen totalmente esclarecedores de esta tipología. Los llaman "reminiscentes" y dicen que sufren de una Inadecuación Esencial. Es a estos seres que van subiendo (generalmente penosamente) la pirámide evolutiva de la conciencia, a quienes ellos denominan reminiscentes. Y dicen que así como en el extremo de menor conciencia, la inconciencia misma obra de protección respecto del dolor existencial , así también en el extremo opuesto, el de mayor conciencia, el dolor ha cesado pues se está en concordancia con la Respuesta. Pero cuando no se está ni del todo dormido ni del todo despierto (ubicación de los reminiscentes), la situación es existencialmente difícil: aún se permanece atrapado por el plano inferior , pero ya hay una lucidez que les permite ver que la Realidad está organizada con una complejidad mayor de lo que usualmente la mayoría ve. Y así surge la Inadecuación Esencial. Dicho en palabras de Eduardo Sosa: "La inadecuación esencial es la figura psicológica que corresponde a quien conoce -o al menos intuye- que hay otra Realidad fuera de la caverna. Quizás no lo sabe aún claramente, quizás sólo lo presiente y simplemente no admite, no soporta permanecer pasivo y encadenado, conforme con las fantasmagorías de las sombras contra la pared. Y ese rechazo a lo consensuado, esa percepción más lúcida que le hace distinto de la gran mayoría, lo sumerge en una cruda soledad. Muchas veces, inclusive, le lleva a dudar de su propia cordura: "algo en mí debe andar mal". La inadecuación esencial se definiría como el sentimiento de la persona que, teniendo un nivel de conciencia más desarrollado de quienes lo rodean, no puede asumirlo como tal, sino que lo vive íntimamente como si esto fuera un defecto. Se siente inadecuado en donde todos parecen estar cómodos; se ve incomunicado en donde todos parecen comunicarse con códigos que no logra aprehender; se encuentra buscando los porqués profundos en donde todos transitan livianas superficialidades. y padece su condición como si fuera un estigma". Es a estos Buscadores, a estos Caminantes de un camino sin retorno, que la Psicología Transpersonal puede ayudar específicamente.
* Para poder mostrarles que no están solos ni que son "especialmente defectuosos".
* Para enseñarles a administrar su hipersensibilidad para que no se hipertrofie.
* Para poder acompañarlos en el proceso de pasar de ser "el patito feo" a convertirse en el cisne que realmente son, asumiendo su verdadera naturaleza y así poder honrarla.
* Para contenerlos en el proceso de recuperar la noción vivencial de que realmente somos parte de ese Todo, de la estructura Sagrada de la Realidad y así permitirles re-ligarse con el Todo.
* Para enseñarles a trabajar sobre sí mismos, madurando una actitud que les permita participar en el mundo, sintiéndose satisfechos de ser quienes son y sin tener que deformarse para ello.
* Para que aprendan a negociar aspectos menores en las relaciones sociales y así poder interrelacionarse eficazmente con el mundo, sin perder la propia identidad.
* Para ayudarlos a aumentar la tolerancia al rechazo y poder elegir con quién estar alejándose conscientemente de los ámbitos que no son para ellos.
* Para permitirles que comprendan que más allá de su mayor nivel de conciencia, también tienen problemas evolutivos a ser resueltos, sin lo cual tenderán a distorsionar el criterio de realidad magnificando neuróticamente su situación. Solo así podrán encontrar su propio modo sano de estar en el mundo.
* Para ayudarles a comprometerse consigo mismos en el ejercicio de los valores esenciales, independientemente del entorno.
* Para estimularles a que se vinculen con personas de similares motivaciones y valores, no sintiéndose más solos en su Búsqueda.
* Para darles ese grupo de pertenencia en el cual se los acepte con su real idiosincrasia ya que los demás serán sus pares en el maravilloso Camino de la evolución de la conciencia humana. "Para este mundo sencillo de hoy, cómodo y satisfecho con tan poco, eres tú demasiado exigente y hambriento; el mundo te rechaza: tienes para él una dimensión de más".
* Aquellos que no se sienten comprendidos en su hipersensibilidad esencial y a los que la vida les duele demasiado.
* Aquellos que están en la búsqueda constante de un Sentido trascendente de la Vida. De un conocimiento profundo de sí mismos y de lo que los rodea.
* Aquellos que se hacen preguntas macrodimensionales que trascienden lo inmediato y que ninguna respuesta fácil puede satisfacer.
* Aquellos que no tienen puestas sus expectativas en el éxito económico o profesional, sino que miran su "estar en el mundo" de una manera distinta, con valores personales más éticos y más humanos, que no encajan con los valores socio-culturales vigentes, a los que sienten como mediocres, como desviados de lo verdaderamente importante.
* Aquellos que por sentirse inadecuados en la mayoría de las situaciones sociales (como si no tuviesen la clave de los códigos que los demás parecen compartir), tienen una marcada dificultad para establecer vínculos sociales, eligiendo entonces la soledad para no ser discriminados.
* Aquellos que vibran emocionalmente con gran intensidad con todo lo que los rodea y por lo tanto se sienten demasiado vulnerables frente a las corazas y máscaras que portan la mayoría.
* Aquellos niños que nos asombran con preguntas o reacciones que no condicen con su edad. Que muestran una profundidad y una curiosidad y ansias de comprensión ajena a su edad.
* Aquellos que tienen una avidez de conocimientos que parece insaciable, que necesitan en todo momento investigar y sobre todo comprender el Misterio que los rodea. los eternos Buscadores.
Estas personas, lamentablemente una proporción pequeña en las estadísticas mundiales, en general nacen y crecen sintiendo y padeciendo estas diferencias, pero sin entenderlas. Es más, a sus propias percepciones se les suma la descalificación de los demás que, como bien sabemos, tienden a alejar a "lo distinto". Los que trabajamos como terapeutas con un enfoque transpersonal, estamos acostumbrados a ver entrar a nuestros consultorios los "despojos" que otros desecharon, simplemente por no entenderlos. Y damos gracias a la Vida porque por fin pudieron venir al lugar correcto, con un terapeuta "tan distinto" como ellos mismos. Y así, poder mostrarles que sí son distintos, pero posiblemente con un "plus" que hasta ese momento no podían ver. Y cuando hablo de plus, no lo hago comparativamente como más valioso, sino como a algo que la mayoría de las personas aún no pudieron acceder: la mayor evolución de su conciencia que les permite tener una conexión con la propia esencialidad. Como ya expliqué en "Un poco de historia" dentro de este mismo sitio, con respecto a los distintos niveles evolutivos de la conciencia y la propia espiritualidad, podríamos decir que son seres que están mucho más cercanos a su verdadera Esencia que el resto. Cuando un bebé nace, es casi esencia pura, "envasada" en un cuerpo que le permite vivir la experiencia humana y con un instinto de supervivencia que va haciendo que busque lo que todo ser humano necesita: que le den afecto, cuidados, atención, amor. Así, guiándose por el ensayo y el error, va probando distintas conductas hasta que encuentra y repite las que cree que son aceptables para sus mayores. Pero en esta selección, van quedando fuera todas las demás posibilidades que también lo constituyen. Más que dejarse crecer y ser todo lo que podría, elige aquellas que siente que son las "aprobadas". Y así comienzan a funcionar los condicionamientos socio-culturales, encarnados en principio por sus padres y familia, y luego por el colegio, amigos, televisión, la sociedad toda. Y que se traducen en todos los "deberías" y "tendrías" que tan bien conocemos. Sus padres (como lo hicieron anteriormente sus propios padres y así sucesivamente), los van llevando a sus propias normas de conductas, valores, y ¡hasta de emociones! que son esperables en él. Así, de a poco, se va construyendo su sentido del Yo, diferenciándolo de "los demás", y también, de a poco, va surgiendo su Ego, que como tiene sus raíces en el cuerpo, se mueve en base a las leyes de la materia: preservarse, sobrevivir, predominar. Muchas veces se malinterpreta que la Psicología Transpersonal está en contra del ego considerándolo algo "malo" que debe morir para poder alcanzar la verdadera espiritualidad. La verdad es muy otra: un Ego sólido es necesario para vivir dignamente en el reino de la materia y así lograr una sana integración entre todo lo que somos: cuerpo-mente-espíritu. Pero cuando ese Ego se junta con los valores socio-culturales predominantes en nuestro mundo, va surgiendo como prioritario la necesidad de Éxito (así, con mayúsculas) tapando con dinero, casas, autos, títulos, etc., nuestra verdadera Esencia. Es como si cada éxito material fuese un velo que nos aleja más y más de lo verdaderamente Trascendente que hay en nosotros. De lo que verdaderamente Somos. Y así nos volvemos cada vez más ignorantes de nosotros mismos. Como dicen las Tradiciones de Sabiduría, vamos dormidos por el mundo sin ver quién somos verdaderamente más allá de los condicionamientos y mandatos que nos fueron dando forma. Pero hay personas que parecería que los velos de la vida no lograron tapar totalmente su esencia. Seres que no se han adormecido con lo material de la existencia: personas que se preguntan para qué nacieron, qué buscan, cuál es el Sentido del nacer y del morir. Son esas personas a las que caractericé antes como "distintos" de los demás. Seres que tal vez sin poder entenderlo o expresarlo claramente, están más ligados con el Todo. Esos seres en el proceso de Búsqueda de sí mismos, van subiendo desde la base de la pirámide de la evolución de la conciencia (donde se encuentra la mayoría dormida, ignorante), escalón tras escalón, hacia la cúspide. Y cuanto más elevado es el nivel de conciencia, menor será la cantidad de individuos que estén en el mismo nivel , siendo ínfimo el número de personas que podrían contabilizarse en la cumbre, donde morarían las conciencias más esclarecidas (quizás el nivel de un Cristo, de un Buda o de cualquier ser Iluminado). Hay dos términos acuñados por la Lic. Virginia Gawel y Eduardo Sosa, co-directores del Centro Transpersonal, que estudiaron exhaustivamente este tema y que me parecen totalmente esclarecedores de esta tipología. Los llaman "reminiscentes" y dicen que sufren de una Inadecuación Esencial. Es a estos seres que van subiendo (generalmente penosamente) la pirámide evolutiva de la conciencia, a quienes ellos denominan reminiscentes. Y dicen que así como en el extremo de menor conciencia, la inconciencia misma obra de protección respecto del dolor existencial , así también en el extremo opuesto, el de mayor conciencia, el dolor ha cesado pues se está en concordancia con la Respuesta. Pero cuando no se está ni del todo dormido ni del todo despierto (ubicación de los reminiscentes), la situación es existencialmente difícil: aún se permanece atrapado por el plano inferior , pero ya hay una lucidez que les permite ver que la Realidad está organizada con una complejidad mayor de lo que usualmente la mayoría ve. Y así surge la Inadecuación Esencial. Dicho en palabras de Eduardo Sosa: "La inadecuación esencial es la figura psicológica que corresponde a quien conoce -o al menos intuye- que hay otra Realidad fuera de la caverna. Quizás no lo sabe aún claramente, quizás sólo lo presiente y simplemente no admite, no soporta permanecer pasivo y encadenado, conforme con las fantasmagorías de las sombras contra la pared. Y ese rechazo a lo consensuado, esa percepción más lúcida que le hace distinto de la gran mayoría, lo sumerge en una cruda soledad. Muchas veces, inclusive, le lleva a dudar de su propia cordura: "algo en mí debe andar mal". La inadecuación esencial se definiría como el sentimiento de la persona que, teniendo un nivel de conciencia más desarrollado de quienes lo rodean, no puede asumirlo como tal, sino que lo vive íntimamente como si esto fuera un defecto. Se siente inadecuado en donde todos parecen estar cómodos; se ve incomunicado en donde todos parecen comunicarse con códigos que no logra aprehender; se encuentra buscando los porqués profundos en donde todos transitan livianas superficialidades. y padece su condición como si fuera un estigma". Es a estos Buscadores, a estos Caminantes de un camino sin retorno, que la Psicología Transpersonal puede ayudar específicamente.
* Para poder mostrarles que no están solos ni que son "especialmente defectuosos".
* Para enseñarles a administrar su hipersensibilidad para que no se hipertrofie.
* Para poder acompañarlos en el proceso de pasar de ser "el patito feo" a convertirse en el cisne que realmente son, asumiendo su verdadera naturaleza y así poder honrarla.
* Para contenerlos en el proceso de recuperar la noción vivencial de que realmente somos parte de ese Todo, de la estructura Sagrada de la Realidad y así permitirles re-ligarse con el Todo.
* Para enseñarles a trabajar sobre sí mismos, madurando una actitud que les permita participar en el mundo, sintiéndose satisfechos de ser quienes son y sin tener que deformarse para ello.
* Para que aprendan a negociar aspectos menores en las relaciones sociales y así poder interrelacionarse eficazmente con el mundo, sin perder la propia identidad.
* Para ayudarlos a aumentar la tolerancia al rechazo y poder elegir con quién estar alejándose conscientemente de los ámbitos que no son para ellos.
* Para permitirles que comprendan que más allá de su mayor nivel de conciencia, también tienen problemas evolutivos a ser resueltos, sin lo cual tenderán a distorsionar el criterio de realidad magnificando neuróticamente su situación. Solo así podrán encontrar su propio modo sano de estar en el mundo.
* Para ayudarles a comprometerse consigo mismos en el ejercicio de los valores esenciales, independientemente del entorno.
* Para estimularles a que se vinculen con personas de similares motivaciones y valores, no sintiéndose más solos en su Búsqueda.
* Para darles ese grupo de pertenencia en el cual se los acepte con su real idiosincrasia ya que los demás serán sus pares en el maravilloso Camino de la evolución de la conciencia humana. "Para este mundo sencillo de hoy, cómodo y satisfecho con tan poco, eres tú demasiado exigente y hambriento; el mundo te rechaza: tienes para él una dimensión de más".
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